Con la visita de Ron Gilbert, creador de juegos como “Monkey Island” al GameLab de Barcelona este pasado fin de semana hemos querido hacer este repaso a las mejores aventuras gráficas de la ya extinta firma de videojuegos de George Lucas, LucasArts, ahora perteneciente al gigante Disney. Vamos a volver a tiempos de mano loca, M.A. Barrakus, cintas en el pelo y juegos en disquete. Esta es nuestra (personal) selección.
Maniac Mansion (1987) y Day of the Tentacle (1993)
El segundo como secuela (y versión mejorada) del primero, a la vez que inseparables, Maniac Mansion fue creado por Ron Gilbert y Gary Winnick y acompañaremos a Dave Miller intentando rescatar a su novia de manos de un científico loco, el doctor Fred. En el juego controlaremos a Dave y a dos personajes más, de entre varias opciones: una de ellas, Bernard, es el personaje principal de Day of the Tentacle, juego en el que defenderemos la Tierra del malvado Tentáculo Púrpura.
En Maniac Mansion, el modo de controlar a los personajes incluía el germen de lo que más adelante sería la barra SCUMM: una barra donde tenemos diferentes acciones a realizar sobre diferentes objetos. Por contra, en Day of the Tentacle ya usamos la barra SCUMM de Monkey Island y nos encontramos con unos gráficos más cartoon, similares a los que encontraremos en juegos como Sam & Max Hit the Road.
Puedes disfrutar de una reciente versión remasterizada de Day of the Tentacle en Steam.
Indiana Jones and the Last Crusade (1989) y Indiana Jones and the Fate of Atlantis (1992)
Para algunos nos encontramos ante unos de los mejores títulos de la historia de las aventuras gráficas e incluso para mucha gente, Fate se trata del mejor. Personalmente soy más de Monkey Island, pero sin duda Fate viene en una no menos digna segunda posición en la escala.
En Last Crusade encarnaremos al famoso arqueólogo interpretado por Harrison Ford en su ya conocida y cinematográfica aventura junto a su padre (Sean Connery). En el juego deberemos resolver puzzles al estilo aventura gráfica combinado de vez en cuando con el combate, algo que resultó una novedad en el ramo. Repetimos aquí el uso de la barra de Maniac Mansion:
Por contra, de nuevo en Fate of Atlantis tenemos de nuevo la barra SCUMM:
Una de las grandes novedades en el género que incluye Fate of Atlantis es la elección de la dificultad. Según si escogemos que Sophia, la co-protagonista, nos acompañe o no, tendremos tres modos de dificultad: acompañados (más sencillo), solos, o solos con más combate.
Monkey Island (1990), Monkey Island 2 (1991), The Curse of Monkey Island (1997), Escape from Monkey Island (2000), Tales of Monkey Island (2009)
La saga de aventuras gráficas por excelencia, Monkey Island nos pone en la piel de Guybrush Threepwood, un joven imberbe de nombre impronunciable que quiere ser pirata. Junto a él nos enfrentaremos al temible pirata-fantasma-zombie LeChuck en sus múltiples encarnaciones, que intentará separarnos de nuestra amada Elaine. Con dosis de puzzles y humor a partes iguales, Monkey Island es hoy en día referencia en el sector y aparece referenciado continuamente en todos los videojuegos del estilo.
Pese a que Ron Gilbert no participó más que en la primera y segunda ediciones, el juego continuó de un modo diferente con la tercera versión, The Curse of Monkey Island, mucho más cartoon y que jubiló definitivamente la barra SCUMM que fue creada para The Secret of Monkey Island. Hoy en día, Ron Gilbert sigue pidiendo a Disney que le ceda la IP para crear su tercera parte de Monkey Island que nunca vio la luz.
Con la cuarta parte Monkey Island abrazó el 3D, en una edición a todas luces inferior a sus hermanas mayores, mientras que con Tales of Monkey Island nos encontramos a un experimento de la por aquel entonces inexperta Telltale Games, que luego nos sorprendió con joyas como The Wolf among us o The Walking Dead.
Con la fiebre de las reediciones también le tocó el turno a Monkey Island. Puedes encontrar aquí la parte 1, y aquí la 2 remasterizadas.
Grim Fandango (1998)
Grim Fandango fue la última nueva aventura gráfica (aparte de Escape from Monkey Island) de LucasArts y fue la incursión del sector en el 3D. Con una cámara fija hoy todavía usada en juegos de TellTale, Grim Fandango nos ilustra la historia de Manny Calavera, la Parca, en un mundo paródico en el que las parcas no son más que agentes de viajes que guían a las almas perdidas en su camino al infierno.
Con un trabajo de traducción brutal, en el que se nos traducen todos los chistes para que los entendamos desde la perspectiva patria (“Palomas, corred, ¡es Gloria Fuertes!”), Grim Fandango nos envuelve en una película de los años 30, con toques y referencias continuas a Casablanca (mención especial a Glotis tocando el piano), con la muerte y la fragilidad de la vida como temática principal y una criminal conspiración como telón de fondo.
Una auténtica joya que hacía uso de un nuevo motor gráfico que sustituía a SCUMM, el GrimE, que solamente volvió a ser usado en Escape from Monkey Island y que hoy en día puede ser rejugada, de nuevo, mediante una remasterización.
Menciones especiales y… quiero más
Menciones especiales aparte deben hacerse para otras aventuras gráficas de LucasArts que no hemos seleccionado aquí pero que no por ello son menores. Sam and Max Hit the Road, por ejemplo, en el que exploramos la sátira más pura, con una animalesca pareja de detectives; Full Throttle o Loom, raíz de muchos de los chistes que encontramos en Monkey Island, incluida la mítica gaviota.
Por otro lado, el espíritu de las aventuras de LucasArts no se ha perdido y, de hecho, es algo muy común encontrarnos con ese característico toque de humor en los juegos de hoy en día. Ejemplos que hay que sin duda mencionar son la saga Deponia, de Daedaelic Entertainment y que puedes encontrar a muy buen precio hoy mismo en Steam, o los juegos de TellTale Games.
Y si quieres lo auténtico y original puedes probar con The Cave, de Ron Gilbert, que no es una aventura gráfica pero mantiene el mismo espíritu. O puedes esperar a que aparezca la aventura gráfica que ha financiado mediante KickStarter con más de 600000 dólares, Thimbleweed Park.
